Piden que los presos toxicómanos cumplan pena en comunidades terapéuticas

La mayoría de los drogodependientes que se rehabilita fuera de prisión no vuelve a delinquir. Proyecto Hombre y Zuria exigen que Salud ponga más profesionales sanitarios en la cárcel y defina competencias.

Rubén Acosta – Diario de Noticias – Miércoles, 25 de Mayo de 2011

Proyecto Hombre, la comunidad terapéutica Larraingoa y el centro Zuria pidieron ayer, en la segunda sesión de las jornadas organizadas por la asociación Salhaketa bajo el título La macrocárcel que nos llega, que los presos drogodependientes no ingresen en prisión y cumplan su pena en comunidades terapéuticas. Según señaló Juantxo Castiella, miembro del centro Zuria, «cumplir condena en la cárcel resta posibilidades de éxito a los tratamientos contra la drogadicción».

A pesar de considerar que esta opción sería la más adecuada para los tratamientos también propusieron como alternativa la creación de un módulo independiente para adictos como el que ya existe en la penitenciaria de Granollers. «No pueden salir del módulo pero las celdas no son cerradas y los funcionarios visten de paisano», explicó Castiella. Según un estudio llevado a cabo por el centro Zuria, de los diez internos en tratamiento de rehabilitación que salieron de la prisión provincial de Pamplona a comunidades terapéuticas en 2009, ninguno de ellos ha vuelto a cometer ningún delito. Aunque esta estadística no se puede extrapolar al ser una muestra muy pequeña, Castiella señaló que «solo un 5% de estos casos reinciden». Sin embargo, los que reciben la libertad definitiva sin pasar por un centro delinquen de nuevo en el 44% de los casos y de los que salen bajo el tercer grado reinciden un 15%. Por otra parte, Alfonso Arana, director de Proyecto Hombre Navarra denunció que «las comunidades terapéuticas tienen largas listas de espera y ya estamos atendiendo casi al 100% de su capacidad». El problema que perciben las asociaciones llega con la apertura, el primer semestre de 2012, de la nueva cárcel ubicada en el barrio de San Jorge y que triplicará a la actual en cuanto a número de internos. «Si hay el triple de personas habrá el triple de personas con problemas de alcohol y drogas», apuntó Castiella. La preocupación de las asociaciones ante la nueva situación se debe a la falta de información que reciben por parte del Departamento de Salud y de la penitenciaria provincial. «Es necesario que Osasunbidea y la prisión provincial acuerden cuáles son sus competencias y que aumenten los profesionales sanitarios y los recursos», demandó Castiella. Lucía Lorda, de la comunidad terapéutica Larraingoa, apuntó que «es fundamental» que el departamento de Salud «aclare sus competencias» y añadió que «los tratamientos en drogodependientes parten de la voluntad de la persona» y cuando se encuentran en prisión los internos no tienen «ni capacidad ni fuerzas» para llevarlos a cabo. aumento de subvenciones Por su parte, Castiella advirtió de que «a día de hoy no hay ningún indicio de que el Gobierno de Navarra vaya a aumentar sus partidas presupuestarias de subvenciones para las organizaciones que trabajamos en el penal». Además, avisó que «en la mayor parte de las comunidades autónomas el 50% de los internos consumen alcohol o cocaína por lo que la mitad de los que vengan necesitarán tratamientos». En concreto, el centro Zuria atendió de forma continuada a 112 presos en 2010, casi la mitad de los que había en el centro penitenciario de Pamplona, mientras que el nuevo recinto está preparado para unas 1.000 personas. A pesar de sus quejas, también resaltaron que la nueva edificación permitirá una mejor distribución de espacios a la hora de trabajar con los encarcelados aunque todavía desconocen cuál será la distribución de la misma. «Que sea una macro cárcel permitirá una mejor utilización de los espacios y módulos y se gestiona de forma correcta», matizó Lorda.

Acerca de Salhaketa Nafarroa

SALHAKETA Nafarroa es una asociación anti carcelaria y anti punitivista. Se constituyó en 1988 y desde entonces ha trabajado por la defensa de los derechos de las personas presas y sus familiares. Con este objetivo se han buscando medidas alternativas a prisión, se trata de fomentar la concienciación social de lo que supone la realidad penitenciaria en Navarra y se han creado y fomentado tanto procesos como programas de inclusión social para personas presas navarras, con arraigo en Navarra o que se encuentran cumpliendo condena en la cárcel de Pamplona.
Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el enlace permanente.